Ingredientes para 10/12 personas:

• 2 kg Lomo bajo de ternera (más o menos)
• 3 cucharadas de mostaza Dijon
• 2 cebollas grandes
• 3 zanahorias
• 1 tallo de apio
• Sal y pimienta
• Aceite de oliva

 Lo primero de todo es preparar la carne. Nuestro carnicero puede hacerlo, limpiando las partes mas grasas y atándola bien, para que cuando la asemos, no se quede deforme.

Para que ase correctamente la pieza tiene que estar a temperatura ambiente, así que la sacaremos de la nevera al menos 30 minutos antes de asarla. También la secaremos con papel de cocina si está húmeda por el exterior, esto ayudará a que se dore bien en la sartén.

Ponemos en una sartén suficiente aceite para cubrir el fondo, y cuando empieza a humear el aceite, ponemos nuestra pieza de carne y dejamos 2 o 3 minutos hasta que dore. Iremos girando la carne para que siga dorando bien por todos lados, incluso por los laterales. Un buen sellado evita que en el horno se salgan los jugos y quede seca.

Cuando esté bien dorada la colocamos en nuestra fuente de asar, que debe ser amplia para que quepan también las verduras.

En la sartén en la que hemos dorado la carne añadiremos medio baso de agua para despegar el fondo, y reservaremos este agua para añadir al asado cuando lo necesite.

La cebolla la cortamos en juliana, la zanahoria la pelamos y cortamos en rodajas, y el apio en rodajas también.

Ponemos toda la verdura en un bol y añadimos un buen chorro de aceite, sal y pimenta. Mezclamos para que todo quede impregnado de aceite.

La carne la embadurnamos con la mostaza, sal y pimienta y ponemos al rededor la verdura ya aliñada.

Con el horno precalentado a 220º (arriba y abajo con aire) metemos la fuente de asar en el horno. Pasados 10 minutos bajamos la temperatura a 200º.

En total estará 45 minutos, a la mitad del tiempo daremos la vuelta a la pieza de carne. 

Iremos comprobando de vez en cuando que las verduras no se queman, mezclando si hace falta. Si vemos que en el fondo de la fuente de asar no hay liquido, añadimos el agua que reservamos de la sartén.

Pasados los 45 minutos sacamos la fuente del horno y la carne la colocamos en un plato. Las verduras las mezclamos y volvemos a meterla en horno el tiempo que haga falta hasta que queden bien doradas. Yo las tuve como media hora más.

Después, al sacarlas del horno, les añado un vaso de agua caliente (en la misma bandeja de hornear) y raspamos bien los bordes para despegar todo lo marroncito que se ha quedado, que es puro sabor concentrado. Además añado el jugo que haya podido soltar la carne. Probamos la salsa de sal y pimienta y listo.

La carne podemos cortarla cuando esté templada. Hay que dejarla reposar, tal cual la hemos sacado del horno, al menos 30 minutos. Así se asentarán los jugos en su interior y quedará súper jugosa.

Corta solo las lonchas que creas que os vais a tomar en ese momento, el resto guárdalo bien hermético en la nevera y podrás ir cortando cuando te haga falta sin que pierda color ni jugosidad.

Sin cortar dura al menos 5 o 6 días en la nevera sin problema. Otra opción en congelar la pieza que no necesitamos para usarla más adelante.